ENRAIZA
Muladhara o chakra raíz es el primer de los chakras, que van desde lo más burdo hasta lo más elevado o espiritual.
Este primer chakra se relaciona con el elemento tierra, se representa por una flor de loto de 4 pétalos y su color es el rojo. Se ubica en la base de la columna vertebral o el perineo. Su correspondencia anatómica son las glándulas suprarrenales.
Cuando muladhara está en equilibrio nos sentimos segurxs. Representa nuestras necesidades básicas, aquello que nos permite sobrevivir. De este modo, se relaciona con los cimientos, el instinto, la lealtad y el sentimiento de pertenencia a la tribu.
Cuando está desequilibrado podemos sentir miedo, ansiedad, falta de vitalidad física y excesiva identificación con lo material.
Los mantras para equilibrarlo son Lam y Ek. Además, es recomendable escuchar música tribal, el contacto con la naturaleza y realizar mulabhanda.
Algunas asanas que trabajan el chakra raíz son tadasana (montaña), malasana (guirnalda), utkatasana (silla), dandasana (bastón), setu bandha sarvangasana (medio puente o puente), baddha konasana (mariposa) o vajrasana (diamante).
Si no equilibramos este chakra antes de atender al resto, habremos crecido sin echar raíces, sin estabilidad.
Aunque sientas que este chakra está equilibrado en ti puedes trabajar en su equilibrio igualmente. Tanto si los chakras se sienten desequilibrados por exceso o por defecto trabajar en ellos nos ayudará a encontrar el punto armónico, es decir, si crees que muladhara predomina en ti no significa que trabajando en él vayas a potenciarlo demasiado, más bien recudirás su efecto hasta su equilibrio armónico.
